sábado, 19 de enero de 2013

(*)

  


lo que dice atrás de 

lo que quiere

lo que escucho

palabras ordenadores

sonidos para jugar con ideas

un sistema en que se es por oposición nos define

los dibujos la poesía las manos en una guitarra

el eco suena adentro

estimulante vibración choca y produce

provoca: una piedra en un estanque

los silencios el vacío

el espacio entre los pies y el agua

lo que arrastra el río

lo que se queda

el almacén de cosas amontonadas en la vidriera

las formas que veo imagino

lo que dibujo alrededor de

las señales imperceptibles

la luz que no pasa detrás de las imágenes

los cajones cerrados

las asociaciones puente

el manchón superficie

la mirada desde el exterior

la ventana del edificio titila

una luz repitente

el dolor refrescante chapuzón

el pedacito de mundo resquebrajado que te tocó pisar

el rompecabezas que intentas construir de a piezas: una palabra

las cenizas vuelan como semillas

de noche se confunden y riegan tu suelo

cielo al revés vos mirás

los frutos caen revientan vuelven de otra forma 
ser una huella rumor polvillo en los muebles 

hendija recoveco guarda

un día despierta

las canciones se terminan

lento o abrupto, igual

terminan

descubrís de una vez

que abajo de todo ese papel sucio

había un crayón rojo





entre un paso y otro creo que hay un instante de vuelo.

viernes, 11 de enero de 2013

**



a cierta hora es el lejano oeste
caminamos,todos duermen, somos 3
en un balcón cubano transformador de energía
veo un perro imaginario
una ciudad es muchas miradas
pegadas a la pared propagandas
chabones en moto creen que está bien decir 
cualquier cosa violenta
nos contamos 
historias de amores adolescentes en la plaza del teatro
la estación se despierta con nuestros pasos
el viento nos roza las espaldas desnudas
vestidos con tiritas
el  perro acompaña el viaje
miles de encuentros y desencuentros cargan un lugar
las épocas que se suceden, las coincidencias
lo que pasó acá mismo y no puedo ni imaginar
los bancos de madera o el andén
la cancha de fútbol para encontrarte con los pibes 
del otro lado
el peligro latente
los pedazos que faltan
el ruido desde afuera de los autos
los muebles con los que soñaban mis papás
las vidrieras, la organización mental
el ruido de puertas metálicas a la madrugada
el calor que encierra la casa
anoche 
me salvaron mis amigas.

jueves, 10 de enero de 2013

-no es tiempo de mandarinas.








Los árboles del patio no dejan de dar ciruelas. Este es el tiempo. Nos encontramos, parece que también se nos están cayendo frutos. Maduros se pegotean en el piso, dejan manchas moradas hermosas, colorean  vestidos. Explotan y suenan al pisarlos en la oscuridad.  La casa no es la misma después de la cosecha.
Imagen: nubes esponjosa se elevan en el cielo. Que nos sorprenda la lluvia. El calor pesa en la burbuja, nos estamos derritiendo de a poco. No sabemos en qué parte cayó la primer gota, pero fue un sonido. Chocan y cantan en la vereda,  contra las botellas y los fuentones del patio, las plantas bailan verdes. La luz  hace de la tarde una película amarillenta. El arco iris nace al fondo de la pila de casas de barrio. Los colores nos llevan al otro lado. Todavía no llegué.
Alguien se encuentra delante de una pila de recuerdos para quemar. Suena una canción de Sara Hebe. Lo rocía con colonia de abuela, para que se queme con aroma refrescante. Encender un fósforo nunca le costó tanto trabajo. Mirar un punto y que la vista se diluya en la superposición. Vuelan cenizas, restos chamuscados de lo que fue. No sabe si festejar.

Tengo cuadernitos para saber cómo voy siendo.
Lo cierto es que no somos ciertos todo el tiempo.





lunes, 7 de enero de 2013

*



Algunas personas viven pendientes del viento. A otros les molesta que vuele arena. Dá el último estímulo a las almendras que se  desprenden de las ramas y caen a la vereda. Allá son peligrosas las correntadas de aire, dice el compañero chileno de Gabi. En la cara para despertarse de ideas. Un airecito que me levante la presión.
Hay voces que no se entrenan. Violeta Parra dijo que nadie tenía la voz tan triste como ella porque nadie sentía su dolor. Reescribo algo que creo. Quiero creer en lo que pienso. Sé de mirarte. Leo en una esquina FUCKING MY MIND. Me imagino.
El ser de otro planeta llevaba una nube sobre su espalda. Hoy logró levantar la nube con sus propios brazos transformados. No sabemos si es bueno o es malo. Es suficiente.
Todo no puede ser poesía, por respeto. Me pregunto si puedo contener tantas historias. Capaz que un día exploto, imagino palabras entre mis tripas pegadas a la pared. Espero que también estén las imágenes, las miradas.
Pienso en los que están leyendo esto. En los que yo leo.  
No hay mística: somos juntos.